Absurda, ridícula y casposa como ninguna sin embargo en eso reside la gracia de este producto en el que uno se encuentra con una historia sencilla llena de tropezones y personajes de lo más chirriantes como ideados apropósito y llevados al límite de la intolerancia tan solo por el mero hecho de querer causar algún tipo de gracia por su ruinosa esquematización.
Aventuras, peleas, desnudos, comedia y romance se revuelven con Amazonas, actores enfundados en trajes de goma interpretando a gorilas que dan saltitos, hacen piruetas y juegan con flores mientras una protagonista busca a un cómico desaparecido y a su hijo, descubre el amor y lucha contra la avaricia de unos cazadores ansiosos de oro.
Un producto que sorprende dada su extrema desfachatez, falta de propósito e intenciones, solo cabe destacar de el que está protagonizado por Victoria Vera (El colegio de la muerte 1975) musa del destape en España, Frank Braña (Los cazadores, 1974) y que del guión se encarga Santiago Moncada (La corrupción de Chris Miller, 1973).
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